Ni burbuja inmobiliaria ni crisis. Nada puede con la vivienda, que sigue siendo un buen nicho para invertir. En la ciudad de Sevilla, uno de cada cuatro pisos que se compran es para sacar rentabilidad, para alquilarlo o para especular con su futura venta.
Según el último estudio del Grupo Tecnocasa, hay un ‘importante número de inversores en la ciudad de Sevilla’. En concreto, un 24% de las viviendas que se venden acaban en manos de inversores. Eso sí, la media nacional es aún más alta y se sitúa en el 28,08%. En el caso de la ciudad de Huelva, los inversores acaparan un 14% de las viviendas que se venden; en Córdoba representan un 23%, mientras que en Málaga alcanza el 22% y en Granada el 30%.
‘Se trata de pequeños inversores, con algunos ahorros, que vuelven al mercado inmobiliario atraídos por una rentabilidad que no encuentran en los mercados de renta fija o variable’, apunta Lázaro Cubero, director del departamento de Análisis e Informes (DAI) del Grupo Tecnocasa.
El 76% de las compraventas realizadas en la capital andaluza en 2016 fueron para primera vivienda, según este estudio, en el que se detalla el perfil del comprador en Sevilla. Un 64% tiene entre 25 y 44 años, el 92% es español y un 63% trabaja por cuenta ajena con un contrato laboral indefinido. El 36% tiene estudios secundarios y un 57% realiza la compra de la vivienda con la ayuda de un préstamo hipotecario. Además, el estudio indica que el 76% tiene como objetivo residir en ese piso recién comprado. Estos datos se extraen de las compraventas intermediadas por la red de oficinas del Grupo Tecnocasa en la capital andaluza, con más de 25 puntos de venta repartidos de manera capilar por toda la ciudad.
En cuanto al tipo de vivienda vendida, el informe del Grupo Tecnocasa indica que tiene las siguientes características: es un piso en el 91% de los casos, no cuenta con ascensor (52%), tiene tres dormitorios (75%) y una antigüedad media superior a los 40 años (73%). En relación a la evolución del precio de la vivienda en Sevilla, en el segundo semestre de 2016 se situó en 1.164 euros el metro cuadrado, con una variación del 1,57 por ciento en relación al mismo semestre de 2015. Por su parte, la hipoteca media en la ciudad en el semestre analizado alcanza los 77.949 euros, un -2,2 por ciento menos que un año antes.